12 consejos sobre aplicación a ofertas laborales y todo el proceso de buscar empleo
Antes de aplicar, investiga sobre la empresa y el puesto al que aspiras. Esto te ayudará a adaptar tu
currículum y tu carta de presentación a las necesidades y expectativas del empleador.
Revisa tu currículum y asegúrate de que esté actualizado, bien redactado y sin errores ortográficos o
gramaticales. Destaca tus logros, habilidades y experiencias relevantes para el puesto.
Prepara una carta de presentación personalizada para cada oferta a la que apliques. Explica por qué
estás interesado en el puesto, qué valor puedes aportar a la empresa y cómo encajas con su cultura y
valores.
Utiliza las redes sociales profesionales como LinkedIn para ampliar tu red de contactos, seguir a las
empresas de tu interés y enterarte de nuevas oportunidades laborales. Cuida tu imagen online y evita
publicar contenido inapropiado o polémico.
Sé proactivo y busca activamente ofertas que se ajusten a tu perfil y objetivos profesionales. No te
limites a enviar tu currículum a cualquier sitio, sino que selecciona aquellas ofertas que realmente te
interesen y motiven.
Sé flexible y abierto a explorar diferentes opciones laborales. No te cierres a una sola industria,
sector o tipo de contrato. Aprovecha las oportunidades de aprendizaje y desarrollo que puedas encontrar
en distintos ámbitos.
Prepara bien las entrevistas de trabajo. Investiga sobre la empresa, el puesto y la persona que te va a
entrevistar. Practica posibles preguntas y respuestas, y ensaya tu presentación personal. Viste de forma
adecuada y profesional, y llega puntual al lugar de la entrevista.
Durante la entrevista, muestra interés, entusiasmo y confianza. Responde con claridad, sinceridad y
ejemplos concretos. Evita hablar mal de tus anteriores empleadores o compañeros. Haz preguntas sobre el
puesto, la empresa y el proceso de selección.
Después de la entrevista, envía un correo electrónico de agradecimiento al entrevistador. Exprésale tu
interés por el puesto, resalta tus puntos fuertes y reitera tu disponibilidad para continuar con el
proceso. Sé breve, cordial y profesional.
Mantén el contacto con el entrevistador o la empresa hasta que te comuniquen el resultado del proceso.
No seas insistente ni agresivo, pero tampoco te quedes en silencio. Demuestra tu interés y tu compromiso
con la oferta.
Si recibes una oferta de trabajo, analiza los pros y los contras antes de aceptarla o rechazarla.
Considera el salario, los beneficios, las condiciones laborales, el horario, el ambiente de trabajo, las
posibilidades de crecimiento, etc.
Si rechazas una oferta de trabajo, hazlo con educación y respeto. Agradece la oportunidad, explica
brevemente tus motivos y deja abierta la puerta para futuras colaboraciones. Nunca sabes si podrás volver
a encontrarte con esa empresa o persona.